Le imponen tratamiento de rehabilitación por sus adicciones.
J. R. G. (35) fue condenado por tenencia simple de estupefacientes, a la pena de tres años de prisión condicional y pago de la multa. Durante ese período, el hombre deberá: fijar domicilio y comunicar cualquier cambio; someterse a tratamiento de rehabilitación a las sustancias estupefacientes; someterse al control del Patronato de Presos y Liberados. En caso de incumplir alguna de estas reglas de conducta podría dejarse sin efecto la modalidad condicional de la pena que se le impuso…