La mediación penal juvenil obtuvo su primer logro: dos adolescentes se comprometieron a brindar charlas de concientización en educación vial tras protagonizar un accidente de tránsito.
Dos alumnas de una escuela secundaria de San Luis del Palmar protagonizaron un accidente de tránsito, y ambas resultaron con heridas leves. En lugar de tramitarla de modo convencional, la causa fue derivada a Mediación Penal Juvenil por decisión de la titular del Juzgado de Menores Nº 3, doctora Pierina Ramírez. Las adolescentes concurrieron al Centro Judicial de Mediación, -ubicado en Casa Lagraña de la capital correntina- donde su secretario, el doctor Miguel Benítez, intervino como mediador. M.N.J. y D.E.T. se pidieron disculpas y se comprometieron a dar testimonio de lo ocurrido respecto del accidente de tránsito, utilizando el hecho como fundamento para una charla de concientización sobre educación vial. La actividad planificada deberá darse en forma conjunta y los destinatarios serán compañeros de la escuela a la que concurren como alumnas del nivel secundario: una de ellas cursa en la Escuela Martin Miguel de Güemes (nocturna) y otra lo hace en el Colegio Secundario Colonia Llano-1° Sección.
En el acuerdo logrado se solicitó la intervención de la Dirección de Servicios de Apoyo y Prevención –DISEPA- dependiente del Ministerio de Educación de la Provincia, para controlar que la medida se efectivice. La Mediación Penal Juvenil es una medida alternativa cuyo espíritu es la resolución no adversarial de los conflictos. Para ello, se necesita acuerdo de las partes y, cuando existen menores de edad, la autorización de sus padres, que en este caso participaron de la mesa de mediación. “Hay un gran logro: la voluntad de las jóvenes de haber querido mediar” explicó el doctor Benítez. Añadió que esa medida se produce en el contexto de la Justicia Restaurativa ensamblada con los principios de Subsidiariedad y Proporcionalidad dentro del marco normativo de la Convención de los Derechos del Niño (art. 40), las Reglas de Beijing (11) y demás Instrumentos Internacionales relativos a la materia. Se trata éste de un caso testigo ya que es el primero que se obtiene en el marco de la Mediación Penal Juvenil, aprobada por el Superior Tribunal de Justicia el pasado mes de junio y que apunta a constituirse como mecanismo alternativo, rápido, justo, gratuito y accesible para resolver conflictos de modo pacífico en casos que involucren a menores de edad.
En ese sentido, se cumplió el objetivo de que las adolescentes no quedaran circunscriptas al paradigma del “menor en conflicto con la ley penal”, sino que ambas –en el proceso de mediación- se vieran a si mismas como sujetos de un conflicto de convivencia al que podían darle un final no adversarial. Ese proceso de mediación espera que las partes que intervienen puedan cristalizar en hechos concretos el concepto de que la justicia se construye entre todos los actores de una comunidad, siendo ellas protagonistas de la solución. El Instituto de la Medición Penal Juvenil fue el resultado de un trabajo mancomunado de la Mesa Interpoderes, cuyos integrantes -Poder Judicial – Poder Ejecutivo – UNICEF – SEHAS- consensuaron visiones y abordajes, con revisiones de UNICEF.
Fuente: Poder Judicial Corrientes