La Sala X de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo resolvió que resultaba injustificada la decisión de un trabajador de considerarse despedido al no coincidir su versión en cuanto a la fecha de ingreso, jornada y modalidad de pago con la brindada por el propio accionante en otro juicio.
En “Pérez, José Ramón c/ Federal Service SRL s/ Despido”, el demandante apeló la sentencia de grado que desestimó el reclamo salarial e indemnizatorio incoado al reputar injustificada la decisión del actor de considerarse despedido.
En su apelación, el recurrente cuestionó el valor probatorio otorgado por el magistrado de grado al testimonio brindado por el actor en los autos “S., R. C. A. c/ Federal Service SRL s/ despido”, tramitados ante el Juzgado Nacional laboral Nº 73, sosteniendo que “hería” el derecho del actor y que debía ser considerado inadmisible.
Los jueces Gregorio Corach y Daniel Stortini citaron al jurista colombiano Devis Echandía al destacar que un testimonio es judicial siempre que ocurra en un proceso cualquiera o en diligencias procesales previas, sin que se requiera que ocurra en el mismo proceso en que se hace valer como prueba.
“Un testimonio judicial puede convertirse en confesión judicial o extrajudicial cuando es trasladado a otro proceso seguido con ese testigo en el cual el hecho declarado entonces resulta perjudicial a éste”, afirmaron los magistrados.
Los camaristas destacaron que ese último era precisamente el caso de autos, en el cual no se discutía que el actor declaró en un proceso judicial haber ingresado a laborar para la demandada con fecha mayo de 2005 cumpliendo una jornada de lunes a viernes de 4 a horas y después de 16 a 20 y sábados de 4 a 8. Los magistrados afirmaron que esos extremos no coincidían con lo afirmado por el trabajador al iniciar la acción judicial que analizaban. “Lo declarado por P. en dicho proceso con respecto a la fecha de ingreso coincide con lo sostenido en estos autos por R. C. A. S. (testigo ofrecido por el actor) quien dijo que el actor comenzó aproximadamente en mayo de 2005 a trabajar pese a que en estos autos se manifestó que el ingreso habría ocurrido en el mes de marzo de dicho año”, se agregó.
En el fallo se interpretó que en el “especial” caso de autos la versión sobre la fecha de ingreso, jornada y modalidad de pago era controvertida por el testimonio del propio actor en otro juicio (al que cabía otorgar el carácter de confesión judicial).
Además, la afirmación del trabajador no se compadecía con los testimonios de quienes comparecieron a declarar a propuesta del demandante. “No cabe sino concluir en que el trabajador no ha logrado demostrar (como le correspondía conf. art. 377 CPCCN) los supuestos de hecho en los que basara su decisión rupturista motivo por el cual se debe mantener en este tema lo decidido en la etapa anterior”, se afirmó.
Fuente: Comercio y Justicia.