Las boletas electorales de los precandidatos a presidente y vice que competirán en las PASO del 11 de agosto no podrán incluir ningún tipo de simbología que aluda al debate sobre la despenalización del aborto, según lo dispuso un fallo dictado por la jueza federal María Romilda Servini.
Fuentes tribunalicias confirmaron que así quedó dispuesto en una resolución dictada por la jueza con competencia electoral de la Capital Federal, a raíz de impugnaciones planteadas vencido el plazo para la presentación de las boletas para las primarias PASO.
El argumento esgrimido por la magistrada, según trascendió, es que las boletas electorales no pueden utilizarse para poner en escena «una discusión que desnaturalizaría la pureza del acto electoral y la genuina expresión del sufragio».
Por ese motivo, ordenó quitar de las boletas «cualquier simbología que exprese alguna de las posturas antagónicas» sobre el debate en torno a la legalización del aborto, es decir, el color verde para marcar una postura a favor de la despenalización, y el color celeste para expresar la posición opuesta, contraria al aborto.
No obstante, según indicaron fuentes judiciales, la prohibición en el uso de cualquier tipo de simbología referida a este debate alcanza por el momentosolamente a las diez boletas correspondientes a precandidaturas a presidente y vice, dado que aún resta que se expida en relación a las categorías legislativas.
Por eso, hasta ahora, la boleta que deberá ser modificada es la del Movimiento al Socialismo que, de acuerdo con el modelo que presentó en la Justicia, en su parte superior derecha exhibe un triángulo verde que remite a los pañuelos que identifican a la militancia en favor de la legalización del aborto.
Ese espacio político impulsa la precandidatura a presidenta de Manuela Castañeira y, a vice, de Eduardo Mulhall.
En tanto, cuando la definición de la Justicia llegue a la categoría de precandidatos a diputado y senador nacionales, se verá si es posible o no que la boleta del Partido Demócrata Cristiano lleve la imagen de un feto, como el que incluyeron en el modelo presentado ante el juzgado de Servini.
Fuente: Diario Los Andes.
