La Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por los jueces Guillermo J. Yacobucci, Gustavo M. Hornos y Juan Carlos Gemignani, confirmó la condena a 10 años de prisión por el delito de trata de personas menores de dieciocho años, dos hechos, agravados por haberse cometido mediante abuso de una situación de vulnerabilidad y haber actuado más de tres personas en forma organizada para cometerlos (conforme los parámetros de la ley 26.364).
Se tuvo por debidamente acreditado que la imputada junto a sus hijos –quienes habían sido previamente condenados- conformaron una organización delictiva para captar mujeres vulnerables de Bolivia, trasladarlas a la Argentina y acogerlas en su domicilio (en la localidad de Colón, provincia de Buenos Aires) para explotarlas laboralmente, restringiéndoles intensamente su libertad de locomoción.
A su vez, las víctimas eran sometidas a agresiones sexuales y a malos tratos. El hecho se dio a conocer porque una de las víctimas pudo pedir auxilio a una clienta del lugar en donde eran explotadas.
Fuente: Centro de Información Judicial.