Según referentes en la temática, mientras que en muchos juzgados las causas se «congelaron», en otros se avanzó usando la tecnología para ir adelantado procesos; incluso, en algunos casos se iniciaron vinculaciones mediante videollamadas Crédito: Shutterstock
risa cumplió 8 años durante la cuarentena. Lleva cuatro, la mitad de su vida, viviendo en un hogar en Beccar para niños y niñas privados de cuidados parentales. En esos años, terminó el jardín y empezó la primaria; se le cayeron los primeros dientes de leche, comenzó clases de baile y fue forjando su personalidad, alegre y coqueta. Junto a Matías, su hermano de 6 años, pasó buena parte de su infancia sin que se le respete un derecho fundamental: tener una familia . En octubre del año pasado y tras las apelaciones de la familia biológica, la Corte Suprema de Justicia de la Nación confirmó su estado de adoptabilidad. Sin embargo, el verano pasó con la feria judicial, llegó la cuarentena y la espera de los hermanos volvió a congelarse . Desde el hogar Portal de Belén, donde viven los chicos -que depende de la Fundación Santa Rafaela María -, subrayan su preocupación sobre lo que llaman «infancias en cuarentena crónica».
LA NACION consultó a responsables de hogares, jueces de familia y especialistas en adopción para conocer qué pasa hoy, a dos meses de establecerse la cuarentena, con los cientos de chicos y chicas que esperan una familia. ¿Durante la feria judicial quedaron congeladas sus causas? ¿Qué estrategias están desplegando las instituciones responsables de velar por sus derechos para que los tiempos no se sigan dilatando?
Las respuestas son variadas. Se trata de una situación imprevista e inédita para la que no hay protocolos y en la que los distintos actores fueron resolviendo sobre la marcha. Algunos jueces iniciaron durante el aislamiento obligatorio, por ejemplo, vinculaciones mediante videollamadas entre los chicos y los aspirantes a convertirse en sus padres. Otros, en cambio, no concuerdan con esa medida. Sin embargo, casi todos coinciden en que sí puede avanzarse en la declaración de la adaptabilidad, la selección de carpetas de postulantes a guarda adoptiva y algunas entrevistas, y que en todos aquellos casos donde ya se había iniciado un contacto previo a la cuarentena entre los chicos y quienes esperan convertirse en sus padres, debe priorizarse el vínculo.
Itatí Canido, directora general de Gestión de Políticas y Programas del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de CABA -del que depende el Registro Único de Aspirantes a Guarda Adoptiva (RUAGA) -, dice que durante las primeras tres semanas de cuarentena, el Poder Judicial, que declaró la feria, se «paralizó absolutamente» , pero que ahora se está empezando a poner en marcha la rueda. En este contexto, Canido sostiene que es fundamental reformular los métodos de trabajo. «Hoy estamos trabajando con la gran mayoría de los juzgados que empezaron a activar la solicitud de búsqueda de legajos de postulantes, las audiencias virtuales y otras situaciones», detalla.Hoy estamos trabajando con la gran mayoría de los juzgados que empezaron a activar la solicitud de búsqueda de legajos de postulantes, las audiencias virtuales y otras situacionesItatí Canido, Consejo de los NNyA de la CABA
Las vinculaciones y guardas que estaban activas antes de la emergencia sanitaria, continuaron. «Teníamos construcciones vinculares en proceso que había que sostener. En cada caso, se evaluó cómo. Al principio, todas por métodos tecnológicos y hoy se están haciendo algunas presenciales con los recaudos necesarios», cuenta. Además, hubo casos en donde ya estaban dadas las condiciones y se estableció el egreso de chicos de los hogares para que se fueran a las casas de sus futuros guardadores. Sin embargo, Canido explica que lo que quedó frenado las primeras semanas fue toda «la parte previa», en manos exclusivamente del Poder Judicial: la declaración de adaptabilidad y el pedido de legajos para buscar familias. Hoy, eso se está activando. Desde el Consejo, por otro lado, los engranajes no se detuvieron : en el caso del trabajo con los postulantes a guarda adoptiva, por ejemplo, continuaron con las evaluaciones para que pudieran inscribirse en el registro y con los encuentros informativos obligatorios de forma virtual.
La larga espera
En octubre de 2019, cuando la Corte Suprema de Justicia confirmó que Brisa y Matías necesitaban una nueva familia, el RUAGA rápidamente inició el proceso de buscar legajos entre los inscriptos. De la revisión de carpetas, participó personal del hogar Portal de Belén, que pidió colaborar en el proceso. Quedaron preseleccionadas tres familias que fueron propuestas al juzgado, a la espera de que este tomara la decisión final.
«Febrero fue un mes híbrido, donde las carpetas pasaron por muchos escritorios con el fin de evaluar a conciencia lo mejor para estos pequeños. Marzo no fue distinto, hasta que se decretó la pandemia y todo quedó en stand by: desde el juzgado nos decían que al estar en feria no se hacían selecciones, pedimos la habilitación de la feria y la denegaron. El viernes pasado, finalmente, nos enteramos de que la van a habilitar», cuentan María Pierro, directora ejecutiva de la Fundación Santa Rafaela María, y Clara Fontenla, directora de Portal de Belén.
Así llegó el octavo cumpleaños de Brisa, con regalos, dos tortas y globos de colores, pero sin conocer a los postulantes para convertirse en sus padres. Si bien las profesionales de Portal de Belén entienden que hay etapas que no se pueden controlar -por ejemplo, si los progenitores apelan la sentencia-, aseguran que muchas veces se «retrasa demasiado» todo el proceso. Al ser un hogar pequeño, el equipo sigue de cerca cada expediente, visitando defensorías y juzgados. «En otros hogares no tienen esa posibilidad, son muchos chicos, poco personal, los niños quedan a la deriva y sus expedientes se archivan», describe Fontenla.Acá en San Martín hay juzgados que sabemos que históricamente se demoran muchísimo en resolver las causas. Sino vamos y movemos los expedientes, quedan cajoneados.María Laura Casal, directora del hogar La Casita
María Laura Casal, directora del hogar La Casita que la Fundación Manos Abiertas tiene en Villa de Mayo, coincide. «En San Martín hay juzgados que sabemos que históricamente se demoran muchísimo en resolver las causas. Sino vamos y movemos los expedientes, quedan cajoneados «, asegura. En La Casita tuvieron casos de niños que llegaron a estar seis años. «En promedio, suelen estar unos tres. No debería ser así. Es mucho tiempo en la vida de un chico», reflexiona Casal.
Vinculaciones virtuales
Fede y Lucas, de 8 y 10 años, son hermanos y viven en un hogar en La Plata. Pocos días antes que se declare la cuarentena, Hugo Rondina, juez a cargo del Juzgado de Familia N°5 y quien lleva su causa, determinó su estado de adoptabilidad. Cuando empezó el aislamiento obligatorio, el magistrado decidió que su equipo hiciera las entrevistas con los candidatos mediante videollamadas, seleccionado a un matrimonio, Germán y Alejandro, para que iniciaran la vinculación. También de forma virtual, el miércoles pasado los chicos conocieron a quienes anhelan convertirse en sus padres. Fue el primer encuentro de muchos, mientras esperan que en pocos días lleguen los presenciales.
«Iniciamos el protocolo de vinculación del Organismo Provincia de la Niñez y Adolescencia. ¿Es igual que el contacto presencial? No, obviamente, pero decidimos ir avanzando de esta manera para ganar tiempo. Cuando llegue el momento, decidiré cómo seguimos», señala el juez.Cuando nos dijeron que habíamos sido seleccionados para empezar la vinculación con los chicos, estallamos en lágrimas y gritosGermán y Alejandro, candidatos a guarda adoptiva
El juzgado a cargo de Rondina no es el único que decidió dar inicio a vinculaciones de forma virtual. Otro ejemplo es el N° 5 de La Matanza, a cargo Maite Herrán, que también autorizó esa medida en el caso de una joven que se encuentra en un hogar y los postulantes a obtener su guarda.
El sueño de una familia
Después de casarse, Germán (52 años, estilista) y Alejandro (51, diseñador gráfico) fueron afianzando la idea de formar una familia por adopción y enero de 2018 se anotaron el registro. El viernes 17 de abril, sonó el teléfono . Del juzgado Nº 5, les preguntaban si aún estaban interesados en adoptar, y el lunes siguiente tuvieron la primera de tres videollamadas con las psicólogas del juzgado y el juez. «Cuando nos dijeron que habíamos sido seleccionados para empezar la vinculación con los chicos, estallamos en lágrimas y gritos», cuenta el matrimonio con la voz entrecortada por la risa y la emoción.
En la primera charla con los chicos, pantalla de por medio, todos estaban nerviosos. Poco a poco, la conversación fue fluyendo. El tema principal fueron los superhéroes y dibujitos que a los chicos les gustan. «¿Cuándo nos van a llamar de nuevo?» , les preguntaron los hermanitos al final de la charla. «Fue una emoción enorme, habíamos visto fotos y los habíamos visualizado, pero escuchar su voz es muy distinto, es hermoso», cuentan Germán y Alejandro. A los días, el más chiquito cumplió ocho años y le hicieron una torta, prepararon el cumpleaños con globos y carteles para festejarlo a la distancia, y le grabaron un video.
Germán y Alejandro no sienten que esa primer viodellamada haya sido «un primer encuentro» con todas las letras. Consideran que el verse de forma presencial es irremplazable, pero que la tecnología permitió dar un primer paso. Están muy contentos con el acompañamiento del juzgado y ya les avisaron que la semana que viene se concretaría la primera visita de ellos al hogar donde están los chicos. Lo que palpitan es que están cada vez más cerca de concretar su sueño de formar una familia por adopción.
El último recurso
Para Fabiana Isa, psicóloga y coordinadora general del programa de extensión Atención de Niños Privados del Cuidado Parental de la Facultad de Psicología de la UBA, hay instancias que son irreemplazables de forma virtual, como las evaluaciones psicológicas y socioambientales de los candidatos a guarda adoptiva. En esa línea, Lucas Aón, a cargo del Juzgado Civil Nº 25 de CABA, coincidiera que la tecnología puede permitir que se avance en algunas instancias del proceso de adopción, pero no en otras. «Hay tres grandes pasos. El primero, es el proceso hasta la declaración de adaptabilidad, en lo que seguimos trabajando durante la cuarentena. Luego, viene la selección de posibles guardadores, que también lo estamos haciendo -enumera el juez-. En tercer lugar, sigue la vinculación, y en este caso en particular, cuando se habla de dar comienzo a una por medio de la tecnología, creo que debe estar limitadísimo a casos muy especiales y esperar a que pueda avanzarse con una presencial. La experiencia de 32 años me indica que la relación física es vital en las vinculaciones».
A Isa le tocó intervenir en el caso de varias familias que ya habían empezado una vinculación con niños y niñas, que se vio interrumpida por la pandemia. «Había que encontrar formas creativas de seguir, por ejemplo, mediante videollamadas. Además, fuimos trabajando con los hogares para que se les permitiera a las familias ir a verlos, con barbijos, respetando la distancia y tomando todas las medida de seguridad», cuenta.
Las convocatorias públicas son otra de las etapas en que, según Isa, se puede avanzar durante la cuarentena. Se trata de llamados abiertos a toda la comunidad, la última instancia para encontrar una familia a los chicos y chicas a los que más cuesta hallarles una. Así ocurrió, por ejemplo, con la de seis hermanitos de entre tres y 16 años . «Es la última posibilidad que tienen de sostenerse en convivencia y no ser separados», dice Canido. Para la especialista, la creatividad, mucho más allá del marco normativo, es una herramienta fundamental que debe «tenerse bien a mano» en momentos como el actual.
Los chicos que esperan: dónde ver las convocatorias púbicas
La Dirección Nacional del Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (Dnrua) agrupa a todas las convocatorias públicas del país, excepto las de las provincia de Buenos Aires, que cuentan con su propia web .
Fuente: Lanacion