Dialogamos con Ayelen Stroker, presidenta de la Cooperativa de Trabajo Esquina Libertad, creada por detenidos y que acompaña a liberados y sus familias
El pedido de que haya condiciones salubres y protegidas para atravesar la pandemia para quienes están privados de libertad fue el comienzo de una serie de reclamos pacíficos que comenzaron hace un mes en distintas cárceles y que tuvo su momento crítico el viernes pasado en el penal de Devoto.
El contexto general del sistema carcelario argentino no era bueno antes de la llegada del coronavirus producto entre otras cosas de la super población y el hacinamiento, en otros motivos.
Stroker afirma que “hace un mes que se venía buscando las vías de reclamo para poder evitar esta situación del viernes pasado en Devoto. No hubo ningún tipo de respuesta por parte de los funcionarios del Estado y desembocó en esto. Decir motín es mal llamar y desvirtuar un reclamo legítimo.”
Además la presidenta de la Cooperativa Esquina Libertad dijo que: “la respuesta del Estado no puede ser nuevamente la represion, cómo se vio en varios penales provinciales como Santa Fe, Mendoza, Melchor Romero, Florencio Varela. También se mostró el mismo accionar contra familiares de detenidos de devoto el viernes por la tarde, hubo detenciones y abusos por parte de la policía.”
El viernes en el marco de la protesta en la cárcel de Devoto se conformó una mesa de negociación y diálogo entre funcionarios del Estado e internos. Desde la organización Esquina Libertad sostienen que es importante que rápidamente se efectivicen las medidas propuestas, que estas resoluciones tienen que replicarse en todas las provincias en general y en particular en la de Buenos Aires porque el sistema carcelario está absolutamente abandonado.
La Cooperativa Esquina Libertad se gestó en el Centro Universitarios Devoto (CUD), que depende de UBA XXII, el programa de la Universidad de Buenos Aires que lleva la universidad a los establecimientos del Servicio Penitenciario Federal. Está integrada detenides, liberades y familiares. Por un lado se encarga de tareas de imprenta, editorial, encuadernación, diseño, serigrafía, sublimación y textil. Por otro lado, realiza talleres y sostiene asesorías de Salud y de Legales. Todo con el fin de apoyar a las personas privadas de su libertad y sus familiares en el proceso de pre y post libertad, para lograr una real inclusión social.
Fuente: radiosur.org.ar