El síndico de un proceso de quiebra denunció el hecho y el tribunal corroboró la ejecución de la maniobra. Los detalles del caso
La Justicia logró detectar y evitar una maniobra ilícita que buscaba utilizar una donación de «adelanto de herencia» como vehículo para perjudicar a los acreedores en un proceso de quiebra.
En el marco del proceso el Juzgado de 39ª Nominación en lo Civil y Comercial, Concursos y Sociedades Nº 7 de Córdoba admitió la demanda de simulación fraudulenta presentada por la sindicatura en contra de Marcia Leonor Matzkin, y su hijo, declarándose la nulidad e ilícita de la donación de un inmueble celebrada entre ambos.
En la causa se discutió la acción de simulación fraudulenta iniciada por el contador Maximiliano Donghi, síndico designado en el proceso falencia de Matzin respecto de 50% de derechos de un bien raíz sito en barrio San Martín, en favor de Marcos Emilio Carlos Bonapace, hijo de aquélla.
La sindicatura solicitó que el porcentaje aludido sea registrado bajo la titularidad de Matzkin y el juez José Antonio Di Tullio evaluó el estado de cesación de pagos de Matzkin al tiempo de suscripción del contrato de donación, indicando que se fijó el 10 de octubre de 2012, determinando la extensión del período de sospecha desde el 6/08/2013, hasta 6/08/2015, fecha de presentación en concurso.
Para el magistrado, constituyó una presunción certera efectuada el 25/03/2013 fue un acto realizado en la época en que la fallida se encontraba en cesación de pagos y se encuentra alcanzado por el poder de recomposición patrimonial, señala Comercio y Justicia.
El juez advirtió la insuficiencia de la defensa y de la estrategia probatoria de la parte demandada para neutralizar la presunción de insinceridad de la donación otorgada de la que han sido partes, remarcando que resultó indicio suficiente el hecho de la continuación en la posesión por parte de Matzkin del inmueble y su presencia y la de su hijo, Bonapace, en el procedimiento de incautación.
Sobre la ocultación del verdadero carácter del acto con el propósito de perjudicar a los terceros acreedores de la fallida, Di Tullio sostuvo que, en el supuesto bajo consideración debe entenderse por «verdadero carácter del acto» la continuación en el ejercicio de los derechos derivados del dominio (por caso el mantenimiento de la posesión) por parte de Matzkin respecto de la porción sobre el inmueble y al móvil de la ocultación, una ilicitud, -que es la causa simulandi-, con su celebración se ha puesto al descubierto la intención exclusiva de sustraer el único bien de importancia económica del patrimonio de la hoy fallida para así disminuir la prenda común de sus acreedores enlazados a las circunstancias hasta aquí relatadas, dan cuenta de que el inmueble en cuestión era prenda común de los acreedores por contratos locativos garantizados personalmente por ella.
Requerimientos de pago
El tribunal agregó que éstos revelan al mismo tiempo que frente a los requerimientos de pago, luego patentizados en sucesivas demandas judiciales, Matzkin se desprendió de su único bien de valor, a título gratuito, a favor de su único hijo como «adelanto de herencia«, comportamiento con el que también se visibiliza la intención de perjudicar a los terceros y acreedores a partir de la celebración del acto simulado.
Asimismo, el magistrado señaló que como presupuesto de procedencia de esa ilicitud, ha quedado en evidencia la existencia del acuerdo simulatorio entre madre e hijo, con sustento en la transmisión gratuita de los derechos y acciones al 50% del inmueble de marras, acto otorgado en plena vigencia del estado de cesación de pagos, destinado a burlar la ley y los derechos de terceros acreedores, ante la amenaza de un proceso judicial promovido por Ricardo López, -a la postre el único acreedor verificado en el proceso-, ante la falta de pago de los cánones locativos, recibiendo Matzkin condena en ese juicio en calidad de garante del contrato de locación, cuya ejecución de sentencia naturalmente perjudicaría el único bien registrable de la fallida.
Por lo expuesto, el juez concluyó que se ha probado una serie de hechos que, tomados aisladamente, nada demuestran con certeza, pero que -apreciados en conjunto- vinculados y ligados unos con otros, hacen desaparecer toda duda razonable de que la donación de los derechos y acciones sobre 50% del inmueble efectuada por Matzkin en beneficio de su hijo Bonapace fue un acto simulado, destinado a disminuir la garantía patrimonial, evitando y/o dificultando el accionar de los acreedores, indica Comercio y Justicia.
En consecuencia, en el fallo se resolvió que la procedencia de la presente acción de simulación, declarando la nulidad de la donación en cuestión instrumentada mediante escritura pública.
Fuero: Civil
Tribunal: Juzgado de 39ª Nominación en lo Civil y Comercial, Concursos y Sociedades Nº 7 de Córdoba
Voces: adelanto de herencia, maniobra ilícita, donación
Fuente: iprofesional