La decisión fue adoptada por el juez federal Ricardo Bustos Fierro.
El demandante adujo que es hostigado personal e ideológicamente por el actual decano. La Justicia Federal de Córdoba ordenó suspender un concurso de títulos, antecedentes y oposición para cubrir un cargo de profesor titular y dos cargos de profesor adjunto, en la materia Derecho Constitucional, en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC). La decisión judicial -a la que accedió Comercio y Justicia– fue adoptada por el juez Ricardo Bustos Fierro después de hacer lugar a una medida cautelar autónoma interpuesta por el profesor interno de la cátedra B de Derecho Constitucional Andrés Rossetti, con el patrocinio letrado del abogado Nicolás Cocca, contra la Facultad de Derecho. En su resolución, el magistrado ordenó que se suspendan los efectos del llamado a concurso cuya fecha de inscripción estaba prevista que comenzara el día 5 pasado hasta el 21, hasta tanto exista una resolución administrativa definitiva. Para así resolver, el juez consideró que se verificaban en grado de verosimilitud suficiente los requisitos para la procedencia de la medida solicitada y que había “indicios serios” de “grave” afectación personal al accionante. Al hacer la presentación, el profesor Daniel Rosetti denunció de que el llamado a concurso en cuestión fue producto de una decisión “absolutamente arbitraria, manifiesta e ilegal, cuya única finalidad es sacarlo del cargo que actualmente ocupa”. Relató que es víctima de una persecución política y personal por parte del actual decano de esa facultad de la UNC, Guillermo Barrera Buteler.
“Lamentablemente, en el presente caso el concurso tan esperado y contra el que se acciona está viciado de arbitrariedad e ilegalidad manifiesta ya que ha sido pensado y orquestado desde las autoridades de la facultad, especialmente en particular en la persona de su actual decano Guillermo Barrera Buteler -también profesor de Derecho Constitucional y con quien tengo una situación de enemistad manifiesta”, acusó la presentación judicial. Rossetti, quien actualmente se desempeña como profesor titular interino de la cátedra de Derecho Constitucional, explicó que en el momento de la aprobación del llamado a concurso en la facultad había 20 asignaturas de la carrera (46 profesores titulares) que estaban interinos y sin embargo la decisión de la facultad fue llamar a concurso en la cátedra de Derecho Constitucional con tres concursos más, que a diferencia de las 20 asignaturas señaladas contaba en ese momento con dos profesores titulares por concurso. Agregó que uno de los profesores titulares de esa materia se jubilará en poco tiempo y por cuestiones de “racionalidad” en el uso de los recursos públicos, practicidad y tiempo lo “lógico” hubiese sido concentrar los cargos a concursar.
Interés personal. Para pedir la suspensión del concurso el accionante agregó que el Estatuto vigente de la UNC impide que se realice un concurso cuando un profesor regular sea designado para ocupar los cargos de rector, de vicerrector o de decano, situación que ocurre con Barrera Buteler. “La aspiración al cargo, en el caso de Barrera Buteler, parece ser intensa, persistente y clara, aun cuando no sea para su propia persona”, explicó. Rossetti también cuestionó al tribunal conformado para llevar adelante el concurso de Derecho Constitucional. “El tribunal vino conformado como está desde el decanato-vicedecanato y no hubo forma, por la rigidez de la mayoría oficialista en el HCD, de discutir ningún nombre alternativo a los propuestos por la gestión en la que estaba el hoy decano como vicedecano”, subrayó el escrito que presentó ante el juez.
Castigar a quienes disienten. En otro de los tramos de su presentación, el profesor agregó: “Mi posición, marcadamente diferente al manejo de la facultad por parte de la gestión de la que siempre formó parte Barrera Buteler, me ha comportado una constante y fuerte persecución, discriminación y maltrato de parte de muchas de las autoridades -sin dudas, en particular, de Barrera Buteler debido a nuestra cercanía temática al enseñar ambos la misma materia- que hacen que este concurso aparezca -en la forma y las condiciones en las que ha sido llamado- como una muestra del castigo que se le debe infligir a quienes disienten”. Y agregó: “No tengo el más mínimo inconveniente en concursar una y muchas veces más con este docente, pero el concurso debe ser realizado en condiciones de imparcialidad, cosa que no sucede con el que se impugna por medio de esta acción”.
Fuente: Comercio y Justicia
