Un hombre de Cinco Saltos, propietario de un departamento que está en el tercer piso de un edificio construido en 1980, fue condenado a ejecutar las obras necesarias para reparar y dar una solución a sus vecinas que se vieron perjudicas por las pérdidas de agua y de líquidos cloacales.
Las mujeres, que viven en el segundo piso en los departamentos 1B y 2B, iniciaron en conjunto una acción civil de daño temido que tramitó en el Juzgado Civil N°3 de Cipolletti.
Aseguraron que por las constantes y permanentes pérdidas de agua del departamento del tercero B padecen severos daños en el cielorraso, mampostería en baño, cocina y comedor, deterioro en pintura, desprendimiento de las paredes, humedad, riesgos con la electricidad, aparición de hongos, bacterias y musgos.
Las propietarias probaron los daños a través de distintos especialistas, constataciones, inspecciones oculares y fotografías aportadas al expediente. También presentaron los presupuestos para llevar adelante las reparaciones. En uno de los inmuebles, el maestro mayor de obra contratado presupuestó 111.829 pesos y en el otro 50.068 pesos.
En otro informe, un arquitecto concluyó que la causa de los daños fue una filtración de agua desde el nivel superior del edificio, la cual actuó en un período de tiempo relativamente prolongado.
Sobre la base de toda la prueba, el fallo hizo lugar a la denuncia por daño temido y condenó al propietario del 3B a ejecutar todas las obras y reparar los inconvenientes.
Fuente: Poder Judicial de Río Negro.