Crece en Internet el número de engaños con falsas promesas de trabajo.

La nueva modalidad es conocida como “fraude de reclutamiento”.

Se contacta a la víctima y se la induce a que brinde datos personales y transfiera dinero a cambio de una oferta laboral. Horacio Azzolín, titular de la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci) advierte sobre una nueva modalidad de fraude denominado “fraude de reclutamiento”, en el que las víctimas son engañadas para que, a cambio de un supuesto empleo futuro, brinden sus datos personales y transfieran dinero. En los últimos meses, este fenómeno registró un notable aumento de reportes en nuestro país. De acuerdo con la Ufeci y diversas publicaciones especializadas en ciberseguridad, en el “fraude por reclutamiento” las víctimas reciben un correo electrónico con una oferta de trabajo de una empresa que se encuentra en el extranjero y no tiene oficinas locales. En esa primera instancia, se hace referencia a una búsqueda laboral o a una solicitud de empleo que en realidad nunca existió, dado que la víctima no se postuló ni hizo gestiones previamente para dicho trabajo en concreto. Por otra parte, la oferta laboral se presenta como muy atractiva por las condiciones de trabajo ofrecidas, la ausencia de requisitos de formación o experiencia, la poca carga horaria o por la muy buena remuneración ofrecida.

La segunda instancia de la estafa consiste en pasar por un breve proceso de selección, que puede consistir en entrevistas telefónicas o vía Skype. En este último caso, se observa que generalmente la imagen no funciona, por lo cual la “videoconferencia” se limita a un intercambio de voces, sin imágenes. Tras la etapa de “entrevistas”, se le informa al “candidato” al puesto sobre ciertos requisitos administrativos -como, por ejemplo, la tramitación de una visa de trabajo en el país receptor-, al tiempo que se promueve el contacto con una tercera persona que será la encargada de concretar la gestión. Esta tercera persona es la que se ocupará de obtener información relevante de la víctima. En primer lugar le solicitará sus datos personales, documento de identidad, fotografías del pasaporte propio y del grupo familiar, o datos sobre cuentas bancarias, CBU, entre otros datos posibles, y en algunos casos se les exige –por supuestos motivos administrativos– el pago de una suma de dinero determinada que deberá enviarse a través de alguna compañía de servicios financieros. Recomendaciones para evitar ser víctima de estas maniobras Para mantener la seguridad en internet, siempre se debe tener sumo cuidado con la información que se publica en las redes sociales, porque hay organizaciones criminales que buscan captar esos datos para usarlos y llevar adelanto hechos delictivos. En este sentido, Ufeci recomienda revisar y configurar adecuadamente las opciones de privacidad en las redes sociales, para evitar exposiciones involuntarias.

Asimismo, en caso de haber recibido una oferta laboral vía correo electrónico, es importante estar atento a cuatro señales de alarma: la oferta laboral refiere a una postulación que usted nunca realizó; el trabajo ofrecido es de pocas horas, permite trabajar desde su casa, tiene muy buena remuneración y no exige conocimientos previos; los contactos con la supuesta empresa son impersonales o ninguna de las personas que lo contactan tienen rostro; le solicitan el envío de información personal, fotos de documentación propia, datos sobre cuentas bancarias o, con el argumento de cuestiones administrativas, la remisión de dinero. Si se presentan una o más de las señales de alarma enunciadas, es posible que se esté ante un “fraude de reclutamiento”. En tal caso, la Ufeci sugiere interrumpir la conversación y no contestar próximos correos electrónicos; no abrir ni descargar adjuntos que hayan sido remitidos; en ningún concepto enviar información personal, bancaria o copia de datos y, por supuesto, en ningún caso transferir dinero al supuesto “empleador”.

También, ante la primera duda sobre la veracidad del anuncio, es recomendable realizar búsquedas on-line para corroborar algunos datos. Por lo general, las nuevas operatorias defraudatorias son alertadas en distintas publicaciones, e incluso las propias empresas cuyo nombre se utiliza para realizar las estafas suelen alertar sobre tales maniobras en sus páginas institucionales. Por último, se aconseja no borrar ninguno de los correos recibidos, ya que podrían servir como evidencia digital en la investigación penal posterior. En caso de haber sido víctima, se puede denunciar el hecho en cualquier comisaría o fiscalía más cercana a su domicilio. Asimismo, en caso de duda, puede contactarse con la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci), telefónicamente al 011 5071-0040 / 0001 / 0002, por correo electrónico a denunciasufeci@mpf.gov.ar

Fuente: Comercio y Justicia

Actualidad Juridica Online - Pruébelo sin cargo!