Para la Justicia, Carina Di Marco sabìa que su pareja abusaba de su hija.
Fue acusada de haber sido «partícipe necesario del crimen» por no haberlo denunciado. La madre de Florencia Abril Di Marco, la niña de 12 años violada y asesinada por su padrastro en 2017 en San Luis, fue condenada este lunes por la tarde en un juicio oral a la pena de 18 años de prisión, acusada de haber sido partícipe necesaria de ese crimen, al considerar que estaba al tanto de los abusos que padecía su hija por parte de su pareja y no los denunció. El Tribunal de la Cámara Penal 2 de San Luis, integrado por los jueces Fernando De Viana, Gustavo Miranda Folch y Hugo Saá Petrino, condenó a Carina Di Marco (35) por unanimidad por el delito de “abuso sexual con acceso carnal, agravado por el aprovechamiento de la convivencia preexistente en calidad de partícipe necesario” en perjuicio de su hija. Para dictar la sentencia de Di Marco, quien lleva dos años detenida, los jueces tuvieron en cuenta como atenuante la falta de antecedentes de la imputada, y consideraron como agravante “la intención del daño causado, circunstancias de tiempo, modo y lugar”. Además, el tribunal pidió que se investigue por el posible delito de falso testimonio a la directora del colegio Florentino Ameghino de la localidad de Palmira en la ciudad de Mendoza, llamada Sonia Mónica Poblet de Baigorria, y a la docente de esa institución María Teresa García Cobos.
Tras escuchar la sentencia y mientras era retirada llorando del tribunal, Di Marco le dijo a los periodistas que la condena «es una injusticia». Su abogada, Karina Mantelli, coincidió con su defendida y agregó que “ojalá que a nadie le pase lo que le pasó a ella, que le mataron la hija y que la condenan a 18 años de prisión cuando este tribunal no da condenas así a ningún abusador”. La abogada consideró, en declaraciones a Télam, que Di Marco sufrió una «condena social» y adelantó que la sentencia se apelará porque la promesa hecha a su defendida es “seguirla peleando”. Durante los alegatos, el Fiscal de la Cámara Penal 2 de la provincia, Fernando Rodríguez, pidió que se condene a Di Marco (35) a la pena de 18 años y seis meses y la defensa solicitó la absolución por el beneficio de la duda, al considerar que no fueron debidamente acreditados los abusos anteriores a la muerte de la niña y la inexistencia de evidencia que indique que su asistida conocía esos padecimientos. Tanto el fiscal como la defensora remarcaron la responsabilidad que pesa sobre las maestras de la escuela donde Florencia Di Marco cursaba sus estudios en la ciudad de Mendoza, antes de radicarse en San Luis, quienes, a sus criterios, no cumplieron con el protocolo de rigor, que incluye la denuncia de los hechos que la niña llegó a contarles a sus docentes, hoy sumariadas. “Hubo un pacto de silencio para conservar el trabajo” sostuvo el fiscal Rodríguez, mientras que Mantelli agregó que las maestras “minimizaron” los dichos de la niña cuando se animó a contar lo que vivía y eso hizo que se bloqueara, volviera a “encapsular” su dolor y permaneciera en silencio.
Frente al Tribunal y quebrada por el llanto, la acusada afirmó durante sus últimas palabras antes de conocer el veredicto no tener nada que decir en su favor y se limitó a pedir que “se haga justicia”. El juicio a Di Marco comenzó el 8 de este mes ante la Cámara Penal 2 de San Luis, que juzgó a la mujer como «partícipe necesaria por omisión» de los abusos que sufrió su hija Florencia de parte de quien era su pareja, Lucas Gómez (32), quien se suicidó en la celda de máxima seguridad en la que estaba detenido por el crimen. Florencia fue vista con vida por última vez el 22 de marzo de 2017, cuando había quedado a cargo de su padrastro porque su madre estaba por dar a luz a un bebé producto de su relación con él. Gómez denunció su desaparición y le dijo a la Policía que la había dejado en la puerta de la escuela y que cuando fue a retirarla al mediodía no la encontró. Un día después, el cuerpo de la niña apareció debajo de un puente en la localidad de Saladillo, donde había sido arrojada al vacío, boca abajo y semidesnuda, tras ser violada y estrangulada con un lazo.
Fuente: Cadena 3